Creemos que para poder liderar y ser ejemplo para otros, primero tenemos que aprender a liderarnos a nosotros mismos en todos los ámbitos de nuestra vida. El dominio personal es una premisa básica para lograr resultados positivos en nuestro Ser y en los equipos en los que participamos.

Creemos en el fuerte vínculo que existe entre nuestras conversaciones y nuestras relaciones personales; y en consecuencia, que los resultados que obtenemos se configuran a partir de las conversaciones que sostenemos con otros. Así mismo, que es posible aprender a conversar de una manera distinta, donde coordinar acciones, pedir, ofertar, reclamar efectivamente, nos permita construir lo que esperamos.

Creemos que cuando aprendemos a vivir sin la necesidad de estar emitiendo juicios acerca de los otros, distinguiendo los hechos de las opiniones, aceptando que hay multitud de interpretaciones, opiniones, costumbres y necesidades; las oportunidades de valorar al otro, de enfocarse en soluciones, de darle espacio a la flexibilidad, de generar alternativas, de mejorar el desempeño y la actitud, de co-crear, son significativamente mayores.